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En el contexto de una gran crisis económica, social, política e institucional que se siente en todo el país, el Gobierno insiste en llevar adelante una "re estructuración" del Estado que consiste en la profundización de sus políticas neoliberales de ajuste y despidos que nos llevaron a este desastre.
Con el argumento de la "eficacia", el "ahorro" y supuestas "dotaciones óptimas" nunca presentadas en público, Macri y el FMI quieren cumplir con una doble tarea: por un lado, hacer pagar los precios de la timba financiera a las y los trabajadores y por otro, seguir achicando el Estado y reduciendo las políticas públicas. Insistimos: detrás de cada despido en el Estado hay un derecho que pierde nuestro pueblo.
El Decreto no solo resulta ilegítimo, sino además inconstitucional, ya que se encuentra fundamentado en el ilegal acuerdo con el FMI, en el que se sostiene la necesidad de llevar adelante un "reordenamiento estratégico que permita concretar las metas políticas diagramadas en materia de reducción presupuestaria".
Mientras el dólar se dispara, y se multiplican sus ganancias así como el hambre y la pobreza de nuestro pueblo, las apariciones del Presidente y sus funcionarios hablando de metereología y sacrificios y poniendo más y más excusas resultan, de mínima, una burla. En menos de tres años, endeudaron al país más que la Dictadura, destruyeron la industria, el salario, las paritarias, abrieron y desregularon la economía y sacaron las Fuerzas Armadas a las calles. Fueron sus políticas, jamás tuvieron autocrítica ni pensaron alternativas. Pasados casi tres años, resulta evidente que el problema no son los sindicatos ni la clase trabajadora; es el modelo.
Desde que asumió este Gobierno en diciembre de 2015, las y los trabajadores en general y nosotros las y los estatales en particular sufrimos despidos y persecuciones, así como la estigmatización de los multimedios oficialistas; fuimos "grasa militante" y "ñoquis". Ya no más.
Con la unidad como bandera, llamamos a oponernos al plan de ajuste y saqueo del Gobierno y el FMI en todos los sectores de trabajo, en las calles y en las plazas. El 12 de septiembre llamamos a movilizar a Plaza de Mayo desde todos los rincones de la Patria y sostenemos la necesidad de adelantar el Paro Nacional convocado por la CGT y las CTA el próximo 24 y 25.
